Alergias primaverales en perros y gatos: causas, síntomas y prevención

La primavera trae flores, sol… y también alergias para nuestras mascotas.
Aunque esta estación es una de las más bonitas del año, también puede ser complicada para ellos. Las alergias primaverales en perros y gatos son cada vez más comunes debido al aumento de polen, esporas de moho, insectos y otros alérgenos ambientales que pueden provocar reacciones en la piel y el sistema respiratorio de nuestras mascotas.

En este artículo te explicamos las principales causas de las alergias primaverales, cómo identificarlas, qué medidas preventivas tomar y cuándo es necesario acudir a un centro veterinario.

¿Qué son las alergias primaverales?

Las alergias primaverales son reacciones exageradas del sistema inmunológico ante agentes ambientales que, en condiciones normales, no deberían provocar ningún problema. Este tipo de alergias en perros y gatos se conoce como dermatitis atópica y es más frecuente durante la primavera y el verano debido al aumento de alérgenos en el ambiente.

La reacción alérgica ocurre cuando el sistema inmunitario de la mascota identifica erróneamente una sustancia inofensiva como una amenaza, provocando una cascada inflamatoria que afecta principalmente a la piel, aunque también puede implicar a las vías respiratorias.

Principales causas de alergias en primavera

Entre las causas más habituales de alergias primaverales encontramos:

  • Polen de árboles, plantas, flores y gramíneas.
  • Esporas de moho, que aumentan con la humedad primaveral.
  • Ácaros del polvo, que se acumulan en alfombras, camas y tapicerías.
  • Picaduras de insectos, especialmente pulgas, mosquitos y abejas.
  • Sustancias químicas presentes en fertilizantes, pesticidas o productos de jardinería.

Estas partículas pueden afectar tanto a la piel como a las vías respiratorias de las mascotas, desencadenando desde cuadros leves hasta reacciones más graves si no se actúa a tiempo.

Síntomas de alergias primaverales

Los síntomas pueden variar según la intensidad de la alergia y la respuesta individual de cada animal, pero los más frecuentes son:

  • Picor intenso (prurito).
  • Enrojecimiento o inflamación de la piel.
  • Rascado, mordisqueo o lamido excesivo.
  • Pérdida de pelo localizada.
  • Otitis recurrentes o infecciones en los oídos.
  • Secreción ocular y nasal.
  • Estornudos frecuentes o tos.
  • Inflamación en las patas o zonas de contacto con alérgenos.

En casos más avanzados, pueden aparecer heridas abiertas, costras e infecciones secundarias, lo que agrava el cuadro y afecta seriamente la calidad de vida del animal.

¿Qué mascotas tienen más riesgo de sufrir alergias?

Cualquier perro o gato puede desarrollar alergias primaverales, pero ciertos factores aumentan la probabilidad:

  • Predisposición genética (algunas razas son más propensas).
  • Mascotas que ya padecen dermatitis o alergias alimentarias.
  • Animales jóvenes (entre 1 y 3 años) son más propensos a desarrollar alergias ambientales.
  • Mascotas que viven en zonas con alta concentración de vegetación o expuestas con frecuencia al aire libre.

Razas como el West Highland White Terrier, Bulldog Francés, Shar Pei o Labrador Retriever tienden a mostrar mayor sensibilidad cutánea, por lo que requieren una vigilancia más estricta durante estas estaciones.

Diagnóstico y tratamiento

El diagnóstico de las alergias se realiza mediante una evaluación clínica detallada, el historial médico del paciente y, en algunos casos, pruebas específicas como tests intradérmicos o pruebas serológicas para identificar el alérgeno responsable. Este proceso es especialmente importante en casos de alergias primaverales en perros y gatos, ya que los síntomas pueden confundirse con otras afecciones dermatológicas o respiratorias.

El tratamiento dependerá de la causa y la gravedad, pero suele incluir:

  • Medicamentos para controlar el picor y la inflamación (corticoides, oclacitinib, lokivetmab).

  • Antihistamínicos o inmunoterapia específica.

  • Control ambiental y reducción de la exposición al alérgeno.

  • Baños dermatológicos con champús calmantes o antibacterianos.

  • Suplementos nutricionales con ácidos grasos esenciales.

Un tratamiento precoz y personalizado mejora notablemente la calidad de vida de la mascota y previene complicaciones como infecciones secundarias o cuadros crónicos de dermatitis.

Consejos para prevenir y reducir las alergias primaverales

  • Evita paseos prolongados en horas de alta concentración de polen (por la mañana y al atardecer).
  • Limpia las patas y el cuerpo de tu mascota al regresar de la calle.
  • Báñala regularmente con productos dermatológicos recomendados por tu veterinario.
  • Utiliza desparasitantes adecuados para prevenir picaduras de pulgas y mosquitos.
  • Aspira y ventila regularmente el hogar para reducir ácaros y alérgenos ambientales.
  • Lava con frecuencia la cama y mantas de la mascota.
  • Minimiza el uso de productos de jardinería cerca de tu animal.

Casos frecuentes en la consulta veterinaria

Durante la primavera, es habitual que los centros veterinarios reciban un aumento en las consultas por alergias. Muchas veces, los cuidadores asumen que el picor o la caída de pelo son normales por el cambio de estación, pero en realidad pueden estar ante un cuadro alérgico que requiere tratamiento.

Diagnosticar a tiempo permite evitar alergias primaverales en perros y gatos, y que el problema se cronifique o que el animal sufra de forma prolongada. Además, abordar el problema desde una perspectiva integral (ambiente, piel, alimentación y sistema inmunitario) permite obtener mejores resultados a largo plazo.

En Clínica Veterinaria Zarpa cuidamos la piel y la salud de tu mascota

En Clínica Veterinaria Zarpa, sabemos lo importante que es mantener la piel y el bienestar general de tu mascota. Si sospechas que tu perro o gato sufre alergias primaverales, no dudes en visitarnos.

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